Seamos sinceros: cuando los días se acortan y empieza a refrescar, la pereza ataca fuerte. El sofá y la manta parecen tener un imán. ¿Cómo darle la vuelta? Aquí van algunos consejos sencillos:
-
Pon horarios: aunque no sea verano, mantén tu cita con el deporte. Igual que si fuera una reunión.
-
Busca un plan corto: no necesitas entrenar una hora. Con 20 minutos de bici o 15 de estiramientos ya activas tu cuerpo.
-
Vístete para moverte: puede sonar tonto, pero ponerse la ropa deportiva ya es media motivación ganada.
-
Hazlo acompañado: salir con un amigo siempre multiplica las ganas.
-
Recuerda cómo te sentirás después: nada como esa sensación de haber cumplido contigo mismo.
El otoño no es una excusa, es un reto. Y si logras mantener tu energía ahora, llegarás al invierno con mucha más fuerza. Así que ya sabes: menos manta, más movimiento. Tu yo del futuro te lo agradecerá.